El equipo de Britney Spears ha salido a defender a la cantante tras las declaraciones de su exesposo Kevin Federline en su próximo libro, You Thought You Knew.

En la obra, Federline expresa su preocupación por el bienestar de Britney y sus hijos en común, Sean Preston (20) y Jayden James (19). Sin embargo, la intérprete de Toxic ha dejado claro que no permitirá que se siga lucrando con su nombre.

“Con las noticias del libro de Kevin saliendo a la luz, una vez más él y otros están obteniendo ganancias a costa de ella”, declaró el representante de Spears a E! News. “Y tristemente, esto ocurre justo después de que los pagos de manutención infantil llegaron a su fin.”

El comunicado añade que, pese a la polémica, Britney solo está enfocada en el bienestar de sus hijos:

“Todo lo que le importa son sus hijos y su bienestar en medio de este sensacionalismo.”

Federline, quien estuvo casado con la artista entre 2004 y 2007, escribe en su libro que “la situación con Britney se siente como si estuviera corriendo hacia algo irreversible” y que teme que sus hijos terminen “sosteniendo los pedazos” si nada cambia.

Spears, por su parte, se reunió recientemente con su hijo Jayden en junio y ha reiterado su deseo de mantener una relación cercana con ambos.

“No hay nada que ame más, nada más importante para mí en este mundo, que mis hijos. Daría mi vida por ellos”, expresó en el pasado.

La estrella pop no ha hecho declaraciones públicas directas sobre el libro, pero su entorno asegura que está decidida a mantener su paz y proteger su relación con sus hijos por encima de cualquier controversia mediática.