No es una novedad que Justin se ha vuelto un Cristiano muy devoto desde que fue bautizado en el 2014, después de unos años muy problemáticos.
Fue una persona cercana a Justin quien comentó que su fe esta creciendo tanto que podríamos verlo renunciar al mundo de la fama. Desde que “nació de nuevo” su fe se ha vuelto una prioridad cada vez mas grande en su vida.
Justin atiende a sus servicios cristianos en la iglesia Churchome en Beverly Hills, donde tienen algunas filas reservadas para el y sus amigos, y reciben tratamiento VIP.