El pico más alto de América del Norte, conocido durante décadas como McKinley, está situado en el parque natural Denali, en la cordillera de Alaska.

Su proximidad con el Circulo Polar Ártico, sumado con la altura -alcanza los 6.194 metros- lo convierten en una de las montañas más frías del mundo, una de las razones por las que no fue coronado por primera vez hasta 1913.